Nicole Mary Kidman nació en Honolulu, Hawái, el 20 de junio de 1967, y fue la primera de las hijas del matrimonio formado por Anthony Kidman y Janelle Stuart, casados en diciembre de 1963. Su padre, un bioquímico australiano, era entonces estudiante de doctorado en un instituto de investigación médica de la Universidad de Hawái. Poco después del nacimiento de Nicole, la familia se trasladó a Washington, donde su padre había obtenido una beca del Instituto Nacional de Salud Mental. Hasta los cuatro años vivió en Estados Unidos, cuando en 1971 su familia regresó a Australia.4
Kidman había comenzado a tomar clases de ballet a la edad de tres años y en Australia ingresó en una escuela de teatro para jóvenes. Su padre se preocupaba de que ella y su hermana menor tuviesen una buena condición física, por lo que les hacía realizar cada mañana ejercicios de gimnasia. Su hermana, Antonia Kidman, es actriz, periodista y presentadora de televisión australiana.
En 1983, Kidman inició su carrera de actriz cuando a sus 16 años intervino en una película ambientada en Navidad, Bush Christmas, que sigue proyectándose frecuentemente en la época navideña. Al enfermar su madre de cáncer de mama, Nicole abandonó sus estudios escolares, pero una vez que su madre se recuperó, reanudó su carrera de actriz. A lo largo de los años ochenta apareció en numerosas películas y series de televisión australianas.
En 1989 se dio a conocer en Europa y en Estados Unidos con la película Calma total, rodada en Australia, coprotagonizada por el actor Sam Neill, y con su siguiente película, ya en Hollywood, Días de trueno (1990), en la que interpretó a una neurocirujana, pareja del personaje de Tom Cruise.
Kidman había alcanzado ya fama, y demostró sus dotes de interpretación y su elegancia en las siguientes películas, en las que actuó con actores tan populares como Bruce Willis y Dustin Hoffman. En 1998 protagonizó, junto con Sandra Bullock, la cinta Prácticamente magia, basada en la novela de Alice Hoffman. En 1999 hizo junto a su entonces marido Eyes Wide Shut (Ojos bien cerrados), la que sería la última película del director Stanley Kubrick, y que tuvo una gran resonancia.
En 2001 grabó, a dúo con el cantante británico Robbie Williams, una versión de la canción Somethin' Stupid de Frank Sinatra.
El mayor reconocimiento profesional hasta entonces lo obtuvo en 2002, cuando fue nominada al Óscar como mejor actriz principal por su papel en Moulin Rouge! película que la consagraría en una estrella en Hollywood y la alejaría de la imagen de esposa de Tom Cruise. Con la película de suspense Los otros, dirigida por el español Alejandro Amenábar, rodada en ese mismo año, también cosechó un éxito importante ya que esta fue más taquillera todavía que la anterior. Tuvo que renunciar a intervenir en La habitación del pánico debido a una lesión en la rodilla contraída durante el rodaje de Moulin Rouge!, pero en el año 2002 ganó el Óscar como mejor actriz principal por su interpretación del personaje de la escritora Virginia Woolf en Las horas (The Hours).
En 2004 trabajaría junto al director danés Lars Von Trier en Dogville, película que fue recibida con muy buenas críticas en el Festival de Cannes. La actriz había quedado fascinada con el trabajo de Von Trier en Rompiendo las olas lo cual contribuyó a aceptar el papel de Grace cuando el cineasta se lo propuso. Aunque en un principio se manejó la versión de que Kidman rechazó hacer la secuela, Manderlay, por el trato que recibió de Von Trier, años después trascendió que su negativa fue para no repetirse como actriz.
En el año 2004 obtuvo una nominación a los Globos de oro por Birth donde según muchos críticos y cinéfilos daría una de las mejores actuaciones de su carrera. La película fue dirigida por Jonathan Glazer y muestra un primer plano de 2 minutos del rostro de la actriz, muy aplaudido y recordado, donde muestra emociones diversas y complejas.
En 2006 protagonizó la película Retrato de una obsesión de Steven Sheinberg donde compartió créditos con Robert Downey Jr. Si bien la película no fue un éxito, al pasar los años se convirtió en insignia del fetiche y lo bizarro.
En 2009 volvió a actuar en un musical, en esta ocasión en Nine. Se suele decir que esta película es un remake de Ocho y medio de Federico Fellini, aunque realmente adapta en formato cinematográfico un musical inspirado por la película de Federico Fellini. Obra de Arthur Kopit y Maury Yeston, el musical se estrenó en 1982 con Raúl Juliá como protagonista. Fellini dio su aprobación para la creación de este espectáculo, pero pidió que no tuviese el mismo título de su película y que tampoco figurase su nombre. Por ello, el musical se llamó Nine (Nueve) en lugar de Ocho y medio, y el personaje principal mantiene el nombre de Guido, que figuraba en la película de Fellini. La versión reciente de Rob Marshall se ciñe fielmente al musical.
El elenco de la película fue considerado uno de los más brillantes de los últimos años, pues se compone de varios ganadores de los Premios Óscar: Daniel Day-Lewis, Nicole Kidman, Marion Cotillard, Judi Dench, Sophia Loren y Penélope Cruz. Otras actrices que completan el elenco son la nominada al Óscar Kate Hudson y la cantante de R&B y Hip-Hop Fergie, vocalista del grupo Black Eyed Peas.
En su primer fin de semana, Nine rozó los 6 millones de dólares en Estados Unidos, una cifra pésima teniendo en cuenta que costó 80 millones debido al lanzamiento simultáneo con Avatar, la película más taquillera de la historia en su momento. Pasadas tres semanas desde su estreno, Nine recaudó 18 millones de dólares, con una gran pérdida que puso en aprietos a sus productores.
En el año 2010, se estrenó en el festival de Toronto Rabbit Hole, película producida por Blossom Films que obtuvo muy buenas críticas y le valió la nominación a los Globos de Oro, a los premios del Screen Actors Guild y su tercera nominación a los premios Oscar.
En ese mismo año Nicole Kidman inició conversaciones para producir y financiar un filme basado en el libro The Danish Girl, y estuvo trabajando en encontrar director y coprotagonista.
En 2011 se anunció que protagonizaría el debut del director surcoreano Park Chan-wook en Estados Unidos, que llevaría el título de Stoker.
En 2012 coprotagonizó The Paperboy, película en la que la mayor parte de los elogios fueron para Nicole: «Nicole Kidman en realidad es excelente como Charlotte: divertida, sexy, conmovedoramente vulnerable». María Corliss escribió: «La revelación, sin embargo, es el rendimiento de Kidman. La renuncia a la imagen de la diosa que tantas veces ha asumido, su Charlotte es una criatura madura, salvaje, con todos sus encantos s***ales. Con una mezcla arriesgada de precisión y abandono, Kidman crea una visión espléndida de la feminidad del sur en su forma más tóxica. No va a suceder, pero merece el premio a mejor actriz en Cannes de este año».
En 2016 interpreta a la madre adoptiva Sue Brierley en la película Lion, gracias a ello obtuvo su cuarta nominación al Oscar, entre otras.
En octubre de 2017, Kidman fue anunciada oficialmente como la protagonista en la película Destroyer, que estará dirigida por Karyn Kusama
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Seguiré actualizando...
el año pasado fue uno de los mejores de su carrera, me alegro mucho de que haya vuelto a ser la gran estrella que un día fue :cheers:
lo salva el color.
el color sí, ahora bien, ella lo luce de 10 
